Aquí va algo que todos ya sabían: las redes sociales fueron creadas con el fin de conectar a la gente, ya sea a través de gustos en común, amigos en común, cercanía geográfica, o cualquier razón que se te pueda ocurrir. Eventualmente, estos monstruos se transformaron en las más grandes herramientas de marketing digital gracias a las posibilidades de anunciarse, pero por desgracia, los anuncios como tal en redes ya no son bienvenidos entre sus usuarios. Hasta el 50% de los usuarios de Instagram se sintieron molestos cuando comenzaron a ver contenido que ellos no aprobaron en su feed, e incluso resentían a las marcas que lo contaminaban.
Esto ya lo sabías, pero, ¿sabías que las redes sociales también se han transformado en una importante causa de depresión en sus usuarios? Esto se debe a que los usuarios tendemos a compartir los aspectos más halagadores de nuestras vidas, dando una impresión falsa de felicidad. Esto, como usuarios, nos da lo que llaman “una representación idealizada de los otros”, lo cual nos hace sentir inadecuados e inseguros.
Aunque esto suena como un lado oscuro de lo que bien podría ser uno de los avances tecnológicos y sociales más importantes del siglo, en el mundo del marketing, esta idealización se vuelve una posible herramienta en forma de los influencers.
La manera básica de explicarla es así: sin tener que involucrar la red social como empresa, contratas a un usuario que tenga una gran base de seguidores que confían en él o ella, y él o ella usa tu producto o servicio frente a todos sus seguidores de una manera orgánica y natural.
Tal cual: tu empresa usa la influencia de estas personas a su favor.
El marketing a través de influencers se ha vuelto la mejor manera de llevar tu marca a millones de posibles clientes en un mercado relevante, fácilmente segmentado y medido. En el caso de Instagram (la cual casi triplica el engagement de redes similares), una red que se ha vuelto cada vez menos amigable para marcas en términos de ambos algoritmos y usuarios, una estrategia como esta que logra esquivar las dificultades de la red, es algo milagroso.
El gran valor de la estrategia es que al usarla, tu marca llega a los usuarios de una manera controlada y a través de lo que ellos consideran una fuente confiable: aquellos que ellos siguen en redes. Instagram, de nuevo, al enfocarse en fotografías glamorosas, es la plataforma perfecta para presentar tu producto o servicio de una manera orgánica, e idealizada.
Una ventaja significativa de esta nueva forma de marketing es que, con una base de 150 millones de usuarios diariamente, siempre podrás encontrar la persona adecuada. No todos los influencers tienen que tener millones de seguidores, así como no todas las compañías pueden costearlos.
Hablando de dinero, muchos influencers, especialmente aquellos con un rango de seguidores mayor a los 100,000, cobrarán mucho por promoción, pero otros no cobrarán ni un centavo: están más que dispuestos a hacer un intercambio de producto por promoción. El gran valor es que no se requiere un presupuesto enorme para tener resultados enormes.
La dificultad está en la selección de influencers. Ya que existe la posibilidad de comprar seguidores falsos–un peligro particularmente real en Twitter e Instagram–es más difícil confiar en los números. Esto, aunado con el hecho de que muchos influencers cotizarán según su número de seguidores y no sus resultados, puede resultar en dificultades.
Un problema adicional también es que muchos usuarios con influencia ya están trabajando bajo la regulación de agencias, las cuales probablemente sería mejor evitar, al menos al principio.
La mejor manera de conseguir al influencer correcto es hacer una exploración exhaustiva de la plataforma que es relevante para tu producto o servicio. Aquí describimos en pasos simples cómo se puede facilitar el proceso.
#1 Haz una lista de hashtags y palabras clave relevantes para tu marca.
#2 Usa la barra de búsqueda en la plataforma para explorar quién está hablando de esos temas.
#3 Haz una lista de usuarios que encuentres.
#4 De uno en uno, explora sus perfiles. Mide su número de seguidores y compáralo con el número de likes/comentarios/shares que tienen sus posteos.
#5 Observa sus posteos cuidadosamente y determina si este usuario ya ha o está actualmente trabajando como influencer para alguna otra marca.
Una vez que hayas elegido a los usuarios indicados, siéntete en libertad de contactarlos ya sea a través de su correo electrónico o la misma plataforma. Si son usuarios populares, lo más probable es que estén esperando un correo como el tuyo. De ahí en adelante, todo es negociación, medición, y alteración.
Por estas y muchas otras razones, los influencers se han vuelto la mejor forma de hacerlo, y la recomendamos ampliamente para cualquier marca, sin importar su tamaño.
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