Algunos se atreven a afirmar, sea por sus mantras o conocimientos psicológicos, que “los ojos son la entrada al alma”, esa ventana que permite escudriñar, así sea por un segundo, el ser interior de una persona. El sentido visual se ha convertido en un beneficio a la hora de expresar y comunicar algo sin necesidad de acudir a las palabras. La actualidad en la red obliga a apelar a lo sensorial y emocional para persuadir a clientes/usuarios y justo ahí está el poder de una herramienta única e importante en el marketing digital: la infografía.
Si buscas un giro en la manera de transmitir tus mensajes corporativos es absolutamente imprescindible la incorporación de este recurso visual a tu lista de actividades por hacer, si es que aún no has empezado con ello. Al ser esquemática, clara y atractiva pasa a ser una alternativa digerible para lectores, clientes, internautas o cualquier persona que necesite un poco de información.
Aprovechar las ventajas de una infografía correctamente puede captar y envolver a quien permanezca del otro lado de la pantalla, y tal asunto toma más fuerza en esta era en la cual la cantidad de datos recibidos llega a ser hasta 5 veces mayor que hace unos años. Por ende, la demanda de los usuarios ha cambiado: hay que entrar en lo visual.
Crear una infografía es un proceso de transformar cualquier información larga y compleja en simple y llamativa con el fin de conseguir objetivos y proporcionar gratas experiencias a los consumidores. Basándonos en cifras del informe realizado por la agencia de marketing digital DemandWave, las infografías se emplean en un 70% en las empresas B2B (negocios entre compañías), porque confían en dicha estructura de contenidos para generar leads. Veamos en qué suman a tu negocio:
Es necesario considerar algunas claves al crear infografías para ser eficaz:
De nada vale desarrollar tópicos si estos carecen de importancia y relevancia, por tal razón, ambos requisitos son fundamentales al darle vida a cada uno de los contenidos. Por otra parte, debes aportar valor con imágenes creíbles y datos interesantes según el propósito. Investiga exhaustivamente, revisa las fuentes, haz contraste de información y da el crédito por los datos empleados.
Estar al tanto de los acontecimientos actuales, las tendencias a nivel global, en las redes sociales y realizar escuchas activas, ayuda a dar con la temática ideal en el momento idóneo. No olvides que el cliente siempre será la prioridad número uno, sus intereses valen, y mucho, al tomar la decisión final.
Atraer al lector con un titular contundente es lo ideal. Lo mismo que sucede al crear un post, sucede con la infografía. De hecho, estas pocas palabras influyen ya que un lector podría animarse a continuar la lectura o no.
Lo que vayas a exponer o comunicar hazlo con una frase única, diferenciada y original. Un consejo: utiliza palabras clave en él.
En un principio procura organizar las ideas y elabora un bosquejo para saber cómo vas a incluir los datos. Mantén un orden lógico y resalta aquello de mayor significado, además, el texto extra te ayudará a llevar el concepto. Las estadísticas son refuerzos que no debes descartar, los números hacen énfasis sobre un tema y ofrecen cifras exactas fáciles de percibir.
Con respecto al diseño, podemos aconsejarte que no selecciones la primera tipografía que veas, ahonda un poco más en el tipo de fuente y encuentra la que concuerde con el tópico a tratar. Todo expresa y comunica.
El estilo visual, atractivo, consistente y simple garantiza parte del éxito con las infografías. El uso de colores coherentes (preferiblemente vinculados con la marca), imágenes y demás elementos serán distintos de acuerdo con el mensaje a transmitir.
Usa programas como Canva, Piktochart, Easelly, etc. Serán de ayuda si quieres dar tu propio toque a los trabajos gráficos. Al jugar con el espacio, estén atentos a la legibilidad de los datos, es decir, tamaño y tipo de fuentes, de imágenes, espacio entre cada elemento, contraste de colores, entre otros.
Las imágenes tienen que contar con excelente calidad, al fin y al cabo, son la parte más representativa. Revisa el formato y asuntos de derechos de autor, si es el caso. Optimízalas con herramientas como RIOT. Una vez lista, publícala cuando sea oportuno lo ideal es compartir en las redes sociales.
Ya que has aprendido por qué son importantes las infografías en el marketing digital, ¡anímate a comenzar o continuar en dicha labor!