Si tienes en cuenta que la mayoría de los usuarios de Internet primero hacen una búsqueda en línea antes de adquirir productos o servicios y que una gran cantidad de los compradores de las tiendas en línea comienzan realizando una búsqueda en la web antes de optar por una en particular (de acuerdo a los datos obtenidos por el estudio Interconnected World: Shopping and Personal Finance, realizado en el 2012) llegarás a la conclusión de que es sumamente importante que tu empresa tenga una fuerte presencia en los motores de búsqueda, para asegurarte de que esta sea fácilmente hallada por tu audiencia.
Para establecer esta presencia deberás tomar una decisión importante: utilizar el presupuesto de tus campañas para pagar por anuncios PPC (o de pago por clic) o enfocarte en una estrategia de optimización orgánica para los motores de búsqueda (o SEO). Antes de optar por alguna de estas opciones, repasemos las diferencias entre ambas.
Cuando las personas ingresan un término de búsqueda en los buscadores, estos brindan dos tipos de resultados: los orgánicos y los pagados. Los resultados orgánicos son el listado de las páginas web que se ajustan mejor a lo que el usuario necesita en base a su relevancia y los pagos básicamente son anuncios. Los propietarios de determinados sitios web pagan para que estos aparezcan frente a determinadas palabras clave. Es posible diferenciarlos claramente, puesto que los anuncios pagados aparecen antes que los orgánicos y de forma destacada.
Si bien esta parece una pregunta sencilla, no es tan fácil de responder ya que todo depende de cuáles son tus objetivos y de lo competitivo que sea tu nicho para posicionar tu sitio web.
Cuando un sitio web aparece entre los primeros resultados de búsqueda orgánica es posible percibir su credibilidad, su autoridad y su liderazgo, que son reconocidos por los motores de búsqueda. Esta percepción se traslada en confianza y esto aumenta las probabilidades de que los usuarios hagan clic en el mismo.
Los beneficios del posicionamiento en los primeros lugares son permanentes, si el contenido del sitio permanece actualizado o si este continúa siendo relevante a pesar del paso del tiempo.
Una vez que el esfuerzo de tus campañas ha dado resultados y tu sitio se encuentra en los primeros lugares, este ranking es más fácil de mantener a lo largo del tiempo.
Las tasas de clic relacionadas con los términos de búsqueda que se encuentran en la parte superior del embudo de compras son más altas en el posicionamiento inorgánico. Esto te permite alentar a los potenciales compradores a que continúen descendiendo a través de las diferentes etapas de manera más sencilla. Esto se puede realizar proporcionándoles un contenido que les permita interactuar con la marca, a medida en que se deslizan a lo largo del embudo de compras.
Estas desventajas dependen de la capacidad de inversión en marketing de cada empresa o sitio web pero entre ellas se puede citar:
Dependiendo de la competencia que exista por determinadas palabras clave, posicionarse en los primeros lugares de los buscadores puede llevar desde varios meses a años.
Es necesario crear contenido de calidad y recurrir a diferentes tácticas de SEO para lograr un buen posicionamiento en los buscadores, lo que puede resultar costoso y demandar mucho tiempo y esfuerzo.
Los anuncios pagados permiten que tu sitio aparezca en los resultados de búsqueda cuando los usuarios ingresan determinadas palabras o frases clave. Estos aparecen en la parte superior y al final de la página de resultados orgánicos. Entre los beneficios que otorga este tipo de inversión se destacan:
A diferencia de las campañas de posicionamiento orgánico, que pueden demorar meses o años en obtener un buen ranking para una página web, con este tipo de estrategias podrás posicionar tu página en los primeros lugares, tan pronto como pagues por los anuncios.
Es posible segmentar este tipo de campañas para que le lleguen a una audiencia determinada, que se ajuste a tus intereses.
Puedes lograr una buena tasa de clics y un mayor porcentaje de conversiones, ya que las personas que buscan una marca o un producto en particular generalmente tienen una mayor intención de compra.
Apenas dejes de pagar por tus anuncios, estos desaparecerán de los resultados de búsqueda.
Muchos consumidores no confían en este tipo de anuncios y en ocasiones los saltean para hacer clic en los primeros resultados orgánicos.
En conclusión:
Si buscas obtener resultados rápidamente o si recién te estás iniciando en un nicho muy competitivo, las campañas PPC te brindarán una inserción inmediata y una gran visibilidad en poco tiempo. Sin embargo, lo más aconsejable es desarrollar una estrategia a largo plazo que combine las campañas de PPC (en las que se publica una oferta temporal o que permiten ganar visibilidad rápidamente) con las de posicionamiento orgánico para lograr ser reconocido como una autoridad en tu sector y aumentar la confianza de los consumidores.